19/02/2020
“San Martín es el templo más importante del románico de Salamanca junto con la Catedral Vieja”, apuntaba ayer el arquitecto y director de las obras de conservación y consolidación estructural del templo, Jesús Castillo Oli, durante una jornada técnica de puertas abiertas.
Además, destacó otras de las peculiaridades de esta iglesia de la Diócesis de Salamanca, como su deformación, “y el hecho de saber que este edificio está rodeado de viviendas hay que prestar especial atención a su estabilidad”.
Desde hace unos meses, se trabaja en su consolidación estructural, que como aclaraba este técnico, “es el fruto de muchos años de trabajo en la iglesia, de monitorizar, medir, estudiar y tratar de entender un poco cómo son las deformaciones que tiene ahora el templo, de dónde han venido, y si siguen evolucionando a algún sitio, y tratar de corregirlo en la medida de lo posible con todas estas acciones correctoras para garantizar la estabilidad estructural”, detalló Castillo Oli.
Las mediciones que han realizado desde hace ya más de dos años, según el director de la obra, “nos han dicho que existe una tendencia a que el movimiento estructural siga, y nos parecía oportuno reconsiderar un análisis de todas las deformaciones y ver qué acciones podíamos hacer para delimitar el alcance de esos problemas”.
Como describe este arquitecto, lo que van hacer es “una obra de cirugía”, porque insiste en que no es una gran obra de actuación, “donde a través de cuatro intervenciones puntuales, vamos a desviar las cargas actuales de la cubierta sobre la cabecera para tratarlas de centrar algo más en los ejes de los pilares”. Y como describe, “de tal manera que corregimos e incrementamos el coeficiente de seguridad que tiene esta estructura frente a las cargas que tiene”.
Jesús Castillo Oli recordó también que el problema que tiene San Martín, “no es nuevo, es un problema de origen, porque cuando se construyó ya se vieron problemas estructurales, y en el propio siglo XII tuvieron que actuar en la propia iglesia según se estaba construyendo”.
La intervención está relacionada con la seguridad, pero los técnicos también entienden que la iglesia de San Martín está apoyada prácticamente en el caserío que la rodea. “Es una iglesia muy particular y entendemos que lo que estamos haciendo es aliviar sus condiciones estructurales ahora mismo, y pensamos que se van a corregir todos los movimientos que tiene actualmente”, remarcó el arquitecto.
El siguiente paso en el que están ahora mismo, y como adelantó, ” ya está cerrado el proyecto”, es que una vez resueltos los problemas estructurales, “actuar en el interior del templo y dignificarlo”, porque cree que un templo de estas características “no se encuentra en las condiciones que debería estar”.
De hecho, adelantó que en ejercicios anteriores, “ya se había puesto en el ojo el actuar en el interior de la iglesia, y en este ejercicio lo más seguro es que ya se actúe en el interior”. Y remarcó que, entre otras actuaciones, “se eliminarán todos los repintes que tiene, y suciedad, como las goteras que hubo antes de las obras en las cubiertas de los años 80-90, así como recuperar esos fingidos que tiene en la nave principal, eliminar las instalaciones de calefacción y crear otro sistema más acorde a la categoria del templo, y en última instancia, intervenir en la iluminación del templo, que también nos parece necesaria”.
Durante la presentación de las jornadas técnicas se firmó el protocolo de colaboración entre la Junta de Castilla y León, a través de su consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, y el director general de la Fundación Iberdrola España, Ramón Castresana, para dar continuidad al Plan Románico Atlántico durante los próximos cuatro años (2020-2023).
La firma se ha llevado a cabo durante la jornada técnica de puertas abiertas celebrada en la iglesia de San Martín de Tours en Salamanca, que ha servido para contextualizar el edificio en la ciudad y para repasar las actuaciones desarrolladas en el templo dentro del Plan.
La jornada ha contado con la presencia, entre otros, de representantes de la diócesis de Salamanca, Policarpo Díaz, vicario de pastoral y párroco en la Unidad Pastoral Centro Histórico; Juan Pedro Melgar, delegado diocesano para el patrimonio y Tomás J. Gil, director del servicio diocesano de patrimonio artístico y cultural; y los párrocos de San Martín Antonio Matilla y Fernando García; así como del director general de Patrimonio del Gobierno Regional, Gumersindo Bueno. El acuerdo alcanzado ayer por la Junta de Castilla y León y la Fundación Iberdrola España, se enmarca en el Plan PAHIS 2020 para el Patrimonio Cultural de Castilla y León y da continuidad a los trabajos desarrollados dentro del Plan de Intervención Románico Atlántico desde 2010.