21/07/2022
SERVICIO DIOCESANO DE COMUNICACIÓN SOCIAL
El próximo lunes, 25 de julio, se celebra la solemnidad de Santiago Apóstol, patrono de España, un día de precepto en nuestro país. Ese día la Catedral Nueva volverá a acoger, a las 12:00 horas, la eucaristía según el rito hispano mozábe. Una liturgia que el Cabildo Catedral celebra tradicionalmente el primer domingo de Adviento y el de Cuaresma, y que el pasado año recuperó su celebración también en la festividad de Santiago Apóstol.
En la antigua tradición hispana la fiesta del martirio del Apóstol Santiago no se celebraba el 25 de julio, como en la actualidad, sino el 30 de diciembre, hasta que en la Reforma gregoriana se cambió por la memoria del traslado de los restos del apóstol Santiago desde Jerusalén a Compostela, realizado por sus discípulos Teodoro y Anastasio.
El rito hispano mozárabe era el modo propio de celebrar la liturgia ,durante el primer milenio de vida del cristianismo, las iglesias comprendidas dentro de la Península Ibérica. Esta liturgia creció y tuvo su auge durante el periodo visigótico, y sobrevivió a la invasión musulmana, hasta que en el siglo XI fue suprimida oficialmente por mandato del papa Gregorio VII para introducir el rito romano, que se sigue actualmente en la mayor parte de la Iglesia católica. Sin embargo, varias parroquias de la ciudad de Toledo tuvieron el privilegio de poder seguir celebrando en aquel rito.
Salamanca se unió a Toledo en la conservación de esta liturgia en el siglo XVI, gracias al señor Maldonado Talavera, que observó cómo junto al río Tormes había un grupo de mozárabes y solicitó al Cabildo que se celebrase ese rito en la Catedral, adquiriendo la capilla de El Salvador, en la Catedral Vieja, conocida como capilla de Talavera, donde se instituyó la capilla mozárabe estableciendo un calendario de 52 misas anuales que después con el tiempo fue desapareciendo.
Desde su fundación hasta 1773 aproximadamente, se mantiene en doce el número de capellanes en la capilla, pero con el paso del tiempo el culto mozárabe pierde el empuje de los inicios hasta el punto que en 1887 existe un solo capellán. A finales del siglo XIX el Cabildo de la Catedral se hace cargo de la capilla. Desaparecida la fundación, en el siglo XX el culto mozárabe en Salamanca no cuenta con capellanes encargados expresamente de su mantenimiento pero sí con hombres ilustres que promueven por su cuenta tanto el estudio como la celebración de la liturgia hispana, como fueron José Artero, Constancio Palomo y Lamberto de Echevarría.
Cabe destacar que durante el episcopado de D. Braulio Rodríguez Plaza varios años se celebró también, en la Catedral Vieja, el triduo pascual según el rito hispano mozárabe. En la actualidad, el Cabildo Catedral de Salamanca mantiene la celebración anual según este rito en la Catedral Vieja el primer domingo de Adviento y el Cuaresma, y la iglesia nueva en la solemnidad del Apóstol Santiago.