28/06/2018
El domingo 1 de julio celebramos en la Iglesia española la fiesta de San Cristóbal, patrono de los conductores y la Jornada de Responsabilidad en el Tráfico 2018 que impulsa el Departamento de Pastoral de la Carretera de la Conferencia Episcopal, desde hace cincuenta años. Para recordar esta efeméride se ha elegido el lema, “Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días” (Mt 28, 21). “Con estas palabras de Jesús queremos sentir la certeza de que Él nos acompaña en todo momento, también cuando subimos a un vehículo, sea como conductores o como viajeros”, señala en el subsidio litúrgico confeccionado para la celebración.
Esta jornada se celebra cada año coincidiendo con el inicio de las vacaciones de verano en las que se incrementa el número de desplazamientos por nuestras carreteras, con los posibles peligros que ello comporta.
Mons. José Sánchez González, presidente del departamento de pastoral de la Carretera dedica parte del Mensaje de la jornada a recordar la trayectoria de esta Pastoral. En él también señala que es necesario “recordar la gravedad y las consecuencias de los accidentes viales y la serie de inconvenientes y perjuicios -muy difíciles de soportar- que acarrean a nuestra sociedad”. “Los centenares de personas que mueren o quedan inválidas anualmente en nuestro entorno -continua- constituyen un problema dramático que afecta a toda la sociedad”. Por eso, “invitamos a todos los ciudadanos, peatones y conductores de cualquier vehículo, a la responsabilidad en el tráfico, pues, como dice el papa Francisco: «para incrementar la seguridad no bastan las sanciones, sino que se necesita una acción educativa que conciencie más sobre las responsabilidades que se tienen sobre quienes viajan al lado»”.
En Salamanca, el director del servicio diocesano de Pastoral de la Carretera Gabino Martín, invita a los conductores y profesionales del volante a celebrar la fiesta de San Cristóbal participando en la eucaristía y posterior bendición de vehículos que tendrá lugar el 1 de julio, a las 12.00 del mediodía en la capilla del Colegio San Agustín (Avda. San Agustín, 113) de Salamanca.