14/02/2020
La soledad es un fenómeno que va en aumento en España como reflejan los datos de Instituto Nacional de Estadística en su encuesta continua de hogares: 4,7 millones de ellos están formados por una sola persona; casi dos millones tienen más de 65 años, de los cuales 1,5 millones son mujeres que viven solas. Un problema estructural e invisible que se ha convertido también en una de las principales causas de exclusión social.
Para ayudar a las personas que padecen soledad, la Delegación diocesana de Familia y Vida lanza una propuesta de una acción comunitaria: “Familias en soledad: camino hacia el encuentro”. Una actividad que se va a llevar a cabo los lunes, desde el 17 de febrero hasta el mes de junio (excepto fiestas), a las 18.00 horas en la Casa de la Iglesia. El objetivo de esta nueva iniciativa es conocer mejor la realidad de la soledad, analizar las causas de las diferentes formas de soledad y encontrar soluciones a la luz de la Palabra de Dios, la doctrina de la Iglesia y de los expertos.
Ponencia inaugural
El programa “Familias en soledad: camino hacia el encuentro” será inaugurado el lunes 17 de febrero con una conferencia a cargo del psicólogo Mateo Javier Hernández, con título: “La soledad, utilidades y riesgos”, a las 18.00 horas en la Casa de la Iglesia. La entrada es libre hasta completar aforo.
Esta nueva actividad se esconde tras la frase “cultura del encuentro”, tantas veces repetida por el Papa Francisco en la que anima a las personas a ser intrépidas y mirar las necesidades de los demás, como hacia Jesús. “Familias en soledad” está dirigido a personas que viven en soledad; soltero/as o viudo/as; jóvenes con embarazos no deseados o madres solteras; enfermos o ancianos con movilidad propia, emigrante o inmigrantes, y “todas las personas preocupadas por esta situación y quieran ponerse a la obra para aminorar la soledad de los hermanos y salir a su encuentro con reflexión, oración y acción”, afirma Florentino Gutiérrez, responsable de la Delegación diocesana de Familia Vida.
Para llevar a cabo esta propuesta de “Camino hacia el encuentro”, Florentino se ha rodeado de un equipo de monitores, integrado por: Marcos García Diego (diácono permanente, padre de familia y miembro de pastoral penitenciaria); Pilar Gómez Núñez (comunidad Hogar de Nazaret); María Élices González (madre de familia y coordinadora e inserción laboral de Cáritas diocesana); Esperanza Rivas (madre de familia, médico y voluntaria de Manos Unidas) y Manuel Díaz (Hermandad de la Soledad).
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