ACTUALIDAD DIOCESANA

13/04/2020

El vicario de Pastoral lanza un mensaje en el inicio de la Pascua

Policarpo Díaz recuerda que es tiempo de “intensificar nuestra relación apostólica con nuestra gente”

Tras la celebración de la Semana Santa, el vicario de Pastoral de la Diócesis de Salamanca, Policarpo Díaz, vuelve a compartir un mensaje cada lunes, a través del canal oficial diocesano de YouTube.

En esta ocasión, recuerda que vivimos “una semana muy especial”, la semana de Pascua, y que por tratarse de un tiempo de confinamiento, “celebramos la Resurrección desde la sencillez y humildad”. Díaz insiste que se ha celebrado por todo lo alto “que Cristo ha resucitado y es la alegría que tenemos en el corazón, que es irresistible, no la podemos contener, es una alegría para transmitirla, para comunicarla, para vivirla…”, admite este responsable.

Por eso, el vicario de Pastoral recuerda que en esta semana de Pascua, “estamos invitados más que nunca a  intensificar nuestra relación apostólica con toda nuestra gente, nuestras comunidades, con los más débiles, con los niños, con los padres, los catequistas, todos los monitores, la gente que participa de nuestros grupos y asambleas litúrgicas, es el momento para dedicarle horas, para estar en contacto… como venimos haciendo toda la Cuaresma y Semana Santa”.

Policarpo Díaz confirma que la Pascua, es un tiempo “de plenitud”, y propone a todos, ” a abrir nuestros corazones, nuestros canales, apaguemos la tele, dejemos ceder tantas cosas que estamos viviendo, y dediquemos el tiempo a contactar con nuestra gente, a través del vídeo, email, el teléfono…”.

Una Iglesia en salida

Y afirma que aunque no se puede salir, “tenemos la obligación de ser una Iglesia en salida, incluso en este tiempo de confinamiento, con la alegría de la Pascua en el corazón, que vamos a transmitir a toda  nuestra gente con cariño y bondad”.

Por último, felicita la Pascua a toda la comunidad diocesana: “A todos las congregaciones religiosas, a los monasterios de vida contemplativa, a todos los laicos de las parroquias, a las delegaciones y servicios diocesanos, a los movimientos, a las hermandades y cofradías, a todos los sacerdotes, a toda la vida de nuestra diócesis, a los que formamos esta gran familia diocesana”.

Y reitera la necesidad de vivir la Pascua “enviados  a compartir la alegría de la fe.”  Asimismo, habla sobre los Evangelios de estos días, “con los que nos daremos cuenta de la cantidad de viajes que hay en estos días, de salidas, de ir a Galilea, de comunicar,  de entrar, es la Pascua, estamos llamados a compartir nuestra vida, nuestra alegría y nuestra fe, especialmente con los que más sufren, ellos son los principales destinatarios del mensaje liberador de Jesucristo”.

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