28/04/2020
Cáritas diocesana de Salamanca ofrece a las personas en situación de desempleo, orientación, formación y acompañamiento en su búsqueda de trabajo. El objetivo es mejorar sus posibilidades de reincorporarse al mercado laboral a través de un itinerario personalizado. Ante la actual crisis sanitaria, “son muchas las noticias que nos llegan estos días sobre el desempleo, ERTES, ayudas económicas…”, señalan desde la entidad. Un crisis que “no es solo una emergencia sanitaria”, como apuntan, “es una crisis socioeconómica que dejará importantes consecuencias cuando finalice la pandemia”.
Desde el área de inserción laboral han tenido que reorganizar su actividad para cumplir con las medidas impuestas. Sus tareas se llevan a cabo ahora de forma telemática “combinando teletrabajo con atención telefónica”. Así, desde que comenzó el confinamiento, el servicio de información y orientación laboral ha llevado a cabo un total de 268 intervenciones en orientación laboral, tanto individual como grupal.
Cáritas mantiene un contacto cercano con empresas, instituciones y empleadores particulares para garantizar que las personas que están participando en su programa de empleo puedan tener mayor posibilidad de inserción laboral. Así, en este tiempo de aislamiento, también se han gestionado ofertas de empleo, fundamentalmente en residencias de la tercera edad y en los sectores de limpieza, alimentación y agricultura, lo que ha permitido que 91 personas hayan podido conseguir un empleo.
Uno de los sectores que está evidenciando una grave desprotección social en esta emergencia sanitaria está siendo el de las empleadas de hogar, que se enfrentan en este momento a un empeoramiento de sus condiciones laborales, ya de por sí precarias. Muchas siguen cuidando a mayores y dependientes, enfrentándose a situaciones de riesgo sanitario al no contar con sistemas de protección adecuado y, otras muchas han perdido su empleo.
Desde el proyecto de empleadas de hogar de Cáritas diocesana mantienen su servicio de asesoramiento, tanto a las empleadas como a los empleadores, desde él se ha continuado la formación vía online. Asimismo, se está haciendo un esfuerzo para dotar de elementos de protección (mascarillas y guantes) a las empleadas de hogar que no pueden conseguirlos de otro modo.
El proyecto de formación laboral de Cáritas diocesana ha continuado sus acciones acompañando a los alumnos de los cursos de formación laboral, “mediante el envío de materiales, con vídeos online, con el objetivo de que sigan su proceso de formación”, señalan desde la entidad. Así, “se ha continuado manteniendo contacto y orientación a las personas que participan en itinerarios individualizados, asesorando en la búsqueda de empleo, las herramientas de búsqueda, etc.”, detallan.
Esta situación está evidenciando cómo “hay perfiles laborales que la sociedad valora muy poco”, como limpiadoras, cuidadoras, reponedores de supermercados, almacenistas,… “y que ahora han demostrado ser imprescindibles”, afirman desde Cáritas. “Confiamos en que la experiencia que estamos viviendo nos sirva de toma de conciencia para comprender que todos somos necesarios y que cuidar unos de otros, es la mejor manera de salir fortalecidos de esta crisis, porque todo ser humano tiene valor y todos estamos vinculados”.
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