11/11/2021
SERVICIO DIOCESANO DE COMUNICACIÓN
Cáritas parroquial Castrense se ha presentado en Salamanca en el marco de la celebración de la Jornada Mundial de los Pobres de este domingo, 14 de noviembre, como apuntaron en el acto oficial que ha tenido lugar en la Subdelegación de Defensa, donde está su sede.
El capellán y presidente de la misma, Francisco Bravo, remarcó que se trata de una iniciativa que afianza la institución, “y fortalece la acción hacia los más desfavorecidos”. Entre los objetivos, como también adelantó, está descubrir las necesidades, “y que podamos colaborar en paliarlas en la medida de nuestras posibilidades”.
En su intervención también destacó la colaboración con las parroquias cercanas a la Subdelegación de Defensa, como la de María Mediadora y Santo Tomás, “con quien compartiremos tareas comunes en este territorio del que nos sentimos parte, y donde el personal militar desarrolla su vida y su misión”. Por último, quiso subrayar que Salamanca cuenta con un recurso más para la asistencia y promoción de los más vulnerables.
El teniente general, Rafael Barbudo, es el director de Cáritas Castrense, y durante la presentación en Salamanca insistió en que la obra de Dios, “está detrás de todo esto”. En concreto, detalló la razón de ser de esta nueva entidad, “que se extiende a militares, Policía Nacional, Guardia Civil, que pertenezcan a bases, acuartelamientos o misiones internacionales”.
En la actualidad, en España existen 39 Cáritas Castrenses, que cuentan con más de 400 voluntarios. “Nacemos para sumar y no para interferir en las actividades de otras asociaciones o Cáritas hermanas”, remarcó Barbudo. En ese sentido, señaló que pueden complementar la labor de aquellas entidades que no puedan llegar a todas las necesidades, “con ayuda económica o de acompañamiento, por ejemplo, en situaciones de soledad o desarraigo, para tender una mano samaritana a las familias que lo necesitan”.
En Salamanca están en el periodo de consolidación y de formación de los voluntarios en sus diferentes programas. El director de Cáritas Castrense dio a conocer algunos de ellos implantados ya en el ámbito nacional, como el de ayuda y atención primaria a familias en situación de vulnerabilidad, “o la creación de un fondo de emergencia que denominamos el granero de José, para atender las necesidades de la pandemia, de alimentos o vivienda, etc.”.
Otro de los programas que destacó se centra en las personas mayores, “para aliviar la soledad y otras necesidades de ese personal jubilado, o sus familiares”. Cáritas Castrense también está presente con iniciativas solidarias en los países donde están en misión, con ejemplos en el Líbano o en Malí, entre otros.
Después de la proyección de un vídeo sobre la actividad y la razón de ser de este nuevo organismo, el ordinario castrense, Carlos Jesús Montes, insistió en su intervención que las fuerzas armadas necesitan una Cáritas, “porque hay personas que lo están pasando mal”.
Antes de proceder a la bendición de las nuevas instalaciones, a cargo del obispo de la Diócesis de Salamanca, Carlos López Hernández, se hizo entrega de un cheque destinado a Cáritas Castrense, el primero que reciben, de los fondos recaudados en un concierto de música, de un total de 219 euros.