31/10/2020
Aprovechando la buena voluntad de los sacerdotes, un hombre joven, de unos 35 años, con pelo rubio teñido, de complexión fuerte y bien vestido, contacta con los sacerdotes por teléfono, les llama por su nombre y “compungido” les comenta el fallecimiento de su madre en Murcia, solicitando un encuentro con el párroco para informarle sobre el sepelio.
Una vez reunidos, el joven, tras ganarse la confianza del sacerdote y confesarle sus sentimientos de angustia, sufrimiento…, llegando incluso a mostrar la foto de la “supuesta fallecida”, comienza a simular su situación de emergencia, manifestando estar en ERTE, casado y con dos niños pequeños, con problemas económicos para hacer frente al traslado de su madre y el enterramiento en la parroquia. Es entonces cuando solicita al párroco una ayuda económica para poder viajar junto a su esposa hasta Murcia.
Este es el ‘modus operandi’ del presunto timador que ha actuado esta semana en Alba de Tormes, Guijuelo y Peñaranda de Bracamonte, y así lo ha denunciado un sacerdote que ha sido víctima de esta estafa. Otros dos párrocos han relatado haber recibido la llamada de este joven, que dice llamarse “Javier”, y que ha actuado del mismo modo, solicitando a los sacerdotes entre 150 y 380 euros para su viaje, pero en su caso no llegaron a entregarle ninguna cuantía.
“Puede haber historias muy distintas pero la clave es la misma: ganarse la confianza del párroco”, asegura uno de los sacerdotes. “El truco es no ir desde el principio a pedir dinero para el viaje, para no levantar sospechas, sino por la vía del sentimiento, crea una lástima hacia él, para luego pedir”, señala otro de los presbíteros, quien observó “algo que no le cuadraba”, y le requirió un documento acreditativo, momento en el que el joven puso diferentes excusas y se marchó, “supuestamente a buscarlo, pero no regresó”.
De esta forma, los sacerdotes han destapado esta posible estafa y advierten a sus hermanos presbíteros sobre esta situación para no caer en el engaño.