04/11/2022
SERVICIO DIOCESANO DE COMUNICACIÓN
Para el obispo de Salamanca, Mons. José Luis Retana, la celebración del Día de la Iglesia Diocesana es un momento “de gratitud y transparencia”, y también recuerda que se trata de los datos de 2021, “que siempre están disponibles en la web de la diócesis y de la Conferencia Episcopal Española“.
En la presentación oficial, el prelado quiso aclarar el grado de pertenencia a la Iglesia, en concreto, a la local. “La diócesis es una porción del pueblo de Dios, con su obispo, los vicarios, los delegados, sus arciprestazgos y las parroquias”, argumenta. Sobre esta última, resalta que “es la casa en medio de las casas”, y donde se vive la mayor parte de la vida cristiana.
Y a la hora de agradecer, Mons. José Luis Retana reconoció que es en esas parroquias donde se ve a los sacerdotes, “que entregan su vida por completo”, y a mucha gente entregada, “como catequistas, los que ayudan a los sacerdotes, con su testimonio de vida cristiana allá donde van, como en sus trabajos”.
El obispo les dio las gracias a todos ellos, y de nuevo, pidió tiempo, “a las personas que nos ayudan, que son hábiles en diferentes materias”, que emplean tiempo y cualidades. Asimismo, agradece la oración, y la ayuda económica en la medida en la que pueden las familias.
Por su parte, la ecónoma de la Diócesis de Salamanca, Amelia Egido, presentó la memoria económica de 2021, aunque quiso mencionar la situación actual, con la crisis energética y la guerra de Ucrania, “por lo que 2022 no está siendo bueno la verdad”.
Cabe recordar que los datos que se presentan agrupan tanto a la diócesis, la administración de la Casa de la Iglesia, la Catedral, el colegio diocesano concertado de Pizarrales y las parroquias.
El total de ingresos fue de 9,9 millones de euros, con una capacidad de financiación del 13,98%. Al respecto, destacó que las aportaciones de los fieles se han incrementado respecto a 2020, con 1,6 millones, el 16,7% de los ingresos, aunque todavía no se han recuperado los niveles previos a la pandemia. Esto engloba las colectas de las parroquias, que son la mayor parte y se han incrementado en más de 20.0000 euros, así como los donativos efectuados en la diócesis o los legados y herencias.
La partida más significativa, de 2,7 millones, corresponde a la asignación tributaria, la X de la Renta,”que es una acción voluntaria y para nosotros importante”, remarcó la ecónoma, con la que el 0,7% de los impuestos se destina a la Iglesia católica. “Es una de las partidas de más peso en la cuenta de ingresos, un 27,9% del total”, detalla.
Dentro de las acciones pastorales y asistenciales, se han invertido 994.000 euros, entre los que destacan los 200.000 euros destinados a Cáritas para el fondo social para los afectados por la pandemia, de los 500.000 aprobados en 2020, y que se dividen en varias partidas; y otros 127.000 euros, de los que 42.000 euros corresponden a una campaña solidaria por el terremoto de La Palma, o 30.000 euros para el proyecto Ranquines.
Por otra parte, desde la diócesis también han ayudado a otras asociaciones sin ánimo de lucro que ayudan a personas desfavorecidas, migrantes o expresidarios, entre otras.
Otra partida de gastos importantes es para la retribución del clero, de 1,2 millones de euros; o el sueldo y los salarios del personal seglar, de 2,9 millones, de los que un 39% es para el colegio diocesano de Pizarrales.
Además, resaltar la inversión en la conservación de edificios y los gastos de funcionamiento, con 2,8 millones, que supone el 40% del total de gastos, donde se recoge el mantenimiento y reparaciones en edificios de la diócesis, sobre todo en templos, ermitas o casas parroquiales. A ello hay que sumar los gastos de suministros de agua, luz, gas, seguros, etc.
Respecto a la actividad celebrativa de 2021, se recuperaron los niveles anteriores a la pandemia, con 874 bautizos, 1.129 primeras comuniones, 370 confirmaciones y 184 matrimonios.
Otro de los pilares de la Diócesis de Salamanca es su actividad pastoral y evangelizadora el ejercicio anterior, con 192 sacerdotes y dos seminaristas, repartidos en 411 parroquias. Cabe destacar la labor de los 439 catequistas y los 873 religiosos, 263 monjas y monjes de clausura, además de cinco diáconos permanentes, 160 misioneros, dos familias en misión y 479 voluntarios que colaboran en la actividad caritativa de la Iglesia de Salamanca, entre otros. Además, en la diócesis se contabilizan un total de 18 monasterios.
En relación a la actividad caritativa y asistencial, la Diócesis de Salamanca asistió a 38.283 personas en 2021, resaltan los 24 centros para mitigar la pobreza, donde atendieron a 14.014 personas; cuenta además con una sede para promover el trabajo, por donde pasaron 1.702 usuarios, a los que se suman tres centros de menores y jóvenes, con 616 atendidos; o los que se dedican a la defensa de la vida y la familia, que prestaron servicio a 3.115 personas, entre otros. En este apartado, se recuerdan también los 11 proyectos de cooperación al desarrollo en el mundo que se financiaron en 2021 y de los que se beneficiaron 90.450 personas.
En el apartado de actividad cultural, destacar los 33 proyectos de construcción y rehabilitación, desarrollados por el Servicio diocesano para el Patrimonio, o los 39 bienes inmuebles inventariados.
A través de esta campaña también se invita a colaborar con la Iglesia diocesana con un donativo, que se facilita con un clic, por internet. Solo hay que acceder a la página web: www.donoamiiglesia.es, y elegir a qué parroquia o diócesis se destina la aportación.