24/10/2022
SERVICIO DIOCESANO DE COMUNICACIÓN
El perfil de la persona sin hogar en Salamanca es de un hombre, de entre 40 y 60 años, de nacionalidad española y con problemas de adicciones, como el alcohol o las drogas, “con poca cualificación y experiencia laboral”. Otra característica en común es que no tienen relaciones familiares. Así lo destacó el responsable del centro de acogida Padre Damián, Alfonso García, durante la presentación de una nueva edición de la campaña de personas sin hogar, bajo el título: “Fuera de cobertura”, que se celebra a lo largo de toda esta semana.
Asimismo, también advirtió que cada vez hay más jóvenes que están en la calle, “va creciendo poco a poco”, así como los casos que les llega de familias enteras, “a veces por desahucios, aunque en Salamanca es menor que en las ciudades más grandes.
En 2022, Cáritas diocesana de Salamanca ha atendido a 577 personas sin hogar, con un ligero incremento respecto al año pasado, como argumentaron sus responsables.”Nos ha sorprendido un dato, ya que de esas 577, el 25% era la primera vez que pasaban por Cáritas, frente a los dos años de pandemia, que tuvimos pocas personas nuevas”, señalaba Alfonso García.
Por Espacio Abierto, que es centro de atención de día, han pasado 420 personas en lo que va de año. Por el servicio de acogida, 262 personas, y por el centro de acogida Padre Damián, 87. En cuenta al porcentaje, el 80% son hombres y el 20%, mujeres.
En relación a la inversión en los programas para personas sin hogar de esta organización diocesana, fue de 840.000 euros, de ellos, 260.000 destinados a Espacio Abierto, y 585.000 al centro de acogida Padre Damián.
El responsable de Espacio Abierto, David Martín del Molino, insistía en que esta campaña trata de denunciar la “falta de acceso a esos derechos”. Además, añadía que a la crisis derivada de la pandemia se ha unido la guerra de Ucrania, “que ha incidido aún más en la vulnerabilidad y la exclusión de estas personas”.
Desde Cáritas quieren que esta campaña sirva para hacer visible “que miles de personas y familias están sin hogar“, y al respecto, “la sociedad y las políticas públicas no se están modificando para cambiar dichas circunstancias”. El responsable de Padre Damián subrayaba la dureza de vivir en la calle, “y el aumento de vulnerabilidad de las personas”.
Por su parte, Martín del Molino reiteraba que los sistemas de protección social, “son acciones para reducir el riesgo y aliviar las situaciones de exclusión y máxima pobreza”. Y desde Cáritas proponen que estos caminos de protección, “se hagan reales”.
Cabe destacar que ambos responsables añadieron que la labor con las personas sin hogar también es posible gracias a los voluntarios, entre 60 y 80 entre ambos recursos.