08/10/2019
El próximo jueves 10 de octubre coincidiendo con la festividad de Santo Tomás de Villanueva la parroquia titular en Salamanca inaugurará los actos conmemorativos de su medio siglo de vida con una solemne eucaristía que será presidida por el cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, quien siendo seminarista y estudiante del Seminario de vocaciones tardías-Colegio Mayor El Salvador de Salamanca, colaboró en esta parroquia y en su centro de educación permanente de adultos. La Eucaristía dará comienzo a las 19.30 de la tarde y será concelebrada por su párroco, Joaquín Tapia, y sacerdotes que han colaborado en la misma.
La comunidad parroquial de Santo Tomás de Villanueva volverá a congregarse el 13 de octubre, a las 12.00 del mediodía, para celebrar la eucaristía dominical y las bodas de oro de la parroquia, concluyendo con un ágape fraterno.
Tras estas dos eucaristías se sucederán otras actividades como la exposición itinerante “Santo Tomás de Villanueva, padre de los pobres”, que se mostrará en la parroquia en el mes de enero, y que está recorriendo toda la geografía española para dar a conocer la vida y la obra del santo agustino y promover su declaración como Doctor de la Iglesia.
La parroquia comenzó su actividad pastoral el 2 de noviembre de 1969, fecha en la que se celebró su primera eucaristía. Inaugurada por Luis Barbero Bellido, a los pocos meses se incorporó su hermano Ezequiel, quienes estuvieron al frente de la misma hasta el año 2010, que tomó posesión como párroco Joaquín Tapia Pérez, aunque siguieron colaborando en ella.
La parroquia de Santo Tomás de Villanueva, junto con la de San Mateo nacieron de la división de la parroquia de Nuestra Señora de Fátima. La parroquia se edificó sobre una antigua fábrica de plásticos y ante la necesidad de alfabetización y progreso cultural del barrio se vio la necesidad de crear un Centro de Educación Permanente de Adultos del que se beneficiaron cientos de personas el año 2009.
En la parroquia se llegaron a bautizar hasta 200 niños al año, como recuerda D. Ezequiel Barbero, y los sábados asistían a la catequesis más de 500 niños. Fruto de la pastoral vocacional en dicha comunidad surgieron varias varias vocaciones religiosas y sacerdotales, como es el caso de Leonildo Ramos Sierra, José Ángel Ávila Hernández o Fernando García Gutiérrez.