22/08/2019
Una de las 26 hermanas dominicas del Convento de las Dueñas palpaba con su mano la réplica del cuadro de Sor Teresa Chikaba, más conocida como ‘La Negrita’ y de su confesor. Ella está ciega y algunas de sus compañeras de comunidad le iban indicando cada detalle de esta obra. En el centro de la obra, una custodia donde el Señor está expuesto, y a los lados, Sor Teresa Chikaba y su director espiritual, en posición de oración. Y sobre sus cabezas, en cada esquina del cuadro se representan a San Vicente Ferrer y San Cayetano. Para estas religiosas es importante recibir la copia de este cuadro, propiedad de la Junta de Castilla y León, y cuya pieza original se encuentra en el Museo de Salamanca.
‘La Negrita’ (1676-1748) está en proceso de canonización desde hace años y las actuales hermanas de este convento la tienen presente en su día a día, y en esta ocasión, también en la conmemoración de los 600 años de la fundación del Convento de Santa María de la Consolación, Las Dueñas, ubicado junto a la plaza del Concilio de Trento.
Antes de dar a conocer la programación para esta efemérides, Sor María Eugenia Maeso, recordaba que se trata de una comunidad que está formada por otras tres, en concreto, unas hermanas que llegaron de Lejona, en Bilbao, hace 16 años, y otras doce de Valladolid hace seis. “Nuestra vida es principalmente de oración, de mucho silencio, pero también de trabajo, porque tenemos que ganar el pan como cualquier persona de condición humilde, y nos dedicamos a la repostería, vendemos pastas”, relataba ante los medios de comunicación. Pero reconocía también que no podía dedicar las mismas horas que un confitero, “porque tenemos muchos momentos de rezo, de coro y de alabanza al Señor”.
Al preguntarla por las vocaciones, esta dominica confirmó que no era un buen momento, “pero esto que ocurre en Europa no es tan general, en Latinoamérica están surgiendo muchas vocaciones y en Vietnam se ha celebra el Capítulo General de los Dominicos y han profesado 21 novicios jóvenes, y de dominicos seglares, los terciarios, había 15.000, y eso nos desborda a nosotros, en unos sitios sube y en otros nos baja”.
La fundación del Convento de Santa María de la Consolación (Las Dueñas) de Salamanca, fue un seis de noviembre de 1419, que es cuando se tomó posesión de unas casas principales que estaban junto al monasterio de San Esteban, de las cuales hizo donación Juana Rodríguez, mujer de Juan Sánchez Sevillano, como consta de una Facultad que para eso dio el obispo de Salamanca, llamado D. Fr. Alonso de Cusanza, fraile de la Orden. Y a lo largo de estos seis siglos de vida cientos de mujeres llegaron a él para consagrarse a Dios.
Bajo el título ‘Dominicas de Salamanca: 600 años de luz‘, va a tener lugar una serie de actividades a cargo de personas ligadas, por unas u otras razones, a la familia dominicana, como detallaba la escritora Amparo Sanz Albornos, autora del libro ‘Chikaba. El Sol de teresa’, sobre la historia de ‘La Negrita’.
La inauguración de los actos tendrá lugar el 4 de septiembre, a las 12:00 horas, con una eucaristía presidida en el convento por el padre Luis A. García Matamoro O.P., decano de la Facultad de Derecho Canónico en la Universidad Pontificia de Salamanca y asistente de las monjas contemplativas de las Federaciones de Hispania y de la Bética.
Asimismo, han diseñado un ciclo de conferencias los días 22, 23 y 24 de octubre en la iglesia del convento, de 19:30 a 20:30 horas, y que permitirán conocer la historia de sus paredes, “un acercamiento a la vida contemplativa de hoy y la presentación del cuadro ‘La Negrita de Salamanca y su Confesor’, ejemplo de una de tantas religiosas santas y de gran virtud que han hecho posible que la luz de Santo Domingo continuara resplandeciendo dentro y fuera de sus muros”.
En concreto, el 22 de octubre impartirá la conferencia Sor María Eugenia Maeso O.P., en agradecimiento y recuerdo a las hermanas que han conservado el espíritu dominicano en este monasterio a lo largo de todos estos siglos, bajo la moderación de la escritora del libro ‘El Sol de Teresa‘, Amparo Sanz Albornos.
El 23 de octubre, el padre prior de los Dominicos de Salamanca, Fray Ricardo de Luis Carballada O.P., moderará la conferencia del Padre Luis A. García Matamoro O.P., que permitirá reflexionar sobre la vida contemplativa de hoy. Por último, el 24 de octubre, el director del Museo Provincial de Salamanca explicará el cuadro ‘La Negrita de Salamanca y su Confesor’.
Asimismo, por primera vez, el Convento de las Dueñas se sumará al programa municipal de Las Llaves de la Ciudad, con visitas guiadas y teatralizadas durante los meses de octubre a diciembre, interpretando la historia del convento y la vida de las MM Dominicas “Dueñas” durante estos años.
Y para cerrar las actividades de los 600 años de la fundación del monasterio, se celebrará una eucaristía a Santa María de la Consolación el 6 de noviembre a las 11:00 horas presidida por el obispo de la Diócesis de Salamanca, Carlos López.
La directora de Políticas Culturales de la Junta de Castilla y León, Mar Sancho, estuvo presente en la presentación de los actos y la donación de la copia del cuadro de Sor Teresa Chikaba, que como remarcó, “contribuye a esta celebración de los 600 años del convento de la madres dominicas de Las Dueñas con una aportación de una réplica de las obras presentes en el Museo de Salamanca, de Sor Teresa Chikaba y su confesor”.
Sancho recordó que se trata de una obra anónima del siglo XVIII, que se encuentra en un estado de conservación malo, “pero que contiene no solo ese valor artístico sino documental vinculado al proceso de canonización de Sor Teresa Chikaba” , y que se ubicará en la sala dedicada a ‘La Negrita’, “que pondrá en valor ese recorrido espiritual y de argumentación que sustenta el proceso que se inició hace unos años”.
Sor Teresa Chikaba era una africana que la capturaron los negreros a los 10 años de edad y la trajeron a España, donde la llevaron como un regalo a Carlos II que era Rey de España, pero finalmente la entregaron a los marqueses de Mancera, que vivían en Madrid, pero como esclava de la marquesa.
Sor María Eugenia Maeso conoce bien la biografía de ‘La Negrita’, “que sufrió mucho, tuvo una vida dura por razón de la piel, que ahora gracias a Dios no nos pasa eso, porque todas las puertas se la rezaban por el color de la piel y los marqueses la quisieron mucho, como una hija, pero la servidumbre era horrible y no la trataba bien”.
Allí estuvo hasta los 27 años, momento en el que decidió ser religiosa, “y le pasó el mismo problema, que no le admitían en ningún convento por ser negra, y logró entrar en Salamanca, en otro convento de dominicas de clausura que ha desaparecido en 1810, con la invasión francesa, que estaba más o menos donde se levanta la iglesia de San Blas”, explica. En ese momento, las 15 monjas que vivían allí “se unieron a nosotras y trajeron los restos de Teresa Chikaba, que había vivido y muerto como una santa, el proceso está en Roma, está abierta la canonización”, insiste esta dominica.