03/06/2019
El miércoles 12 de junio la ciudad y Diócesis de Salamanca celebran la fiesta en honor a su patrón San Juan de Sahagún, cuyos restos mortales descansan en una de las urnas del altar mayor de la Catedral Nueva de Salamanca. Con este motivo su parroquia titular en Salamanca ha preparado diferentes actos para honrar al Santo. Se iniciaron el pasado 25 de mayo con los conciertos que ofrecieron la Coral salmantina y el Parentum Chorus y continuarán con el novenario en su honor, del 3 al 11 de junio. Todos los días habrá adoración eucarística y novena a las 19.30 de la tarde en la parroquia de San Juan de Sahagún, seguido de la eucaristía.
La eucaristía de la víspera de la fiesta, el 11 de junio, será presidida por el Sr. Obispo de Salamanca, Mons. Carlos López, y en ella el Consistorio salmantino realizará una ofrenda floral al Santo. Al día siguiente, jueves día 12 de junio,se celebrará en la Catedral Nueva la fiesta solemne con una eucaristía a las 12.00 del mediodía.
Juan González Martínez, que así se llamaba el Santo, nació el 24 de junio de 1430 en la localidad leonesa de Sahagún, donde se educó con los benedictinos. Su férrea voluntad y personalidad causó admiración al obispo de Burgos D. Alonso de Cartagena, que le apadrinó en los primeros estudios teologales. Fue párroco de Santa Águeda, la más pobre de la ciudad de Burgos. Allí ejerció su ministerio durante unos años hasta que llegó a Salamanca para estudiar Teología. Se consagró como fraile agustino el 18 de junio de 1463, fecha que adopta el nombre de Fray Juan de Sahagún. De los 23 años que pasó en Salamanca, 16 los vivió como eremita de San Agustín.
Fray Juan fue un hombre carismático que consagró su vida a la eucaristía. Rezaba horas y horas y sus largas homilías, en las que gustaba recrearse pues veía a Dios en sus eucaristías, causaban honda impresión en la feligresía. Visitaba enfermos, unía a familias desarraigadas, asistía a moribundos y ayudaba a los pobres. Además de ser conocido por sus predicaciones, su mayor logro fue conseguir apaciguar la querella que enfrentó durante cuarenta años a dos bandos de familias nobles de la ciudad, con muchas muertes por ambas partes. Cuentan que hizo más de doscientos milagros en su vida, en la que fue un firme defensor de los derechos de los humildes y trabajadores. Falleció en Salamanca el 11 de junio de 1479 con fama de santidad. Sería beatificado por el papa Clemente VIII en 1601 y canonizado por Alejandro VIII en 1691. Desde entonces su festividad se conmemora el 12 de junio.
El pasado 2 de mayo se cumplieron cuarenta años de la apertura de la urna donde se conservan los restos de San Juan de Sahagún en la Catedral. Ante la reiterada petición de la parroquia titular, la urna fue abierta para extraer una reliquia del Santo con objeto de ser venerada por los fieles. Esta concesión le fue concedida con ocasión del V Centenario de la muerte del Santo. Cuenta de ello daba la revista diocesana Comunidad: “El Sr. Obispo y el Cabildo catedralicio han accedido graciosamente a tan piadosa instancia, haciendo donación de una reliquia insigne -concretamente el húmero izquierdo- para que pueda ser venerada por los fieles en el templo parroquial”.
El quinto centenario fue celebrado con diversos actos jubilares. Así, se intensificó la evangelización en todos los niveles, tuvo lugar una asamblea parroquial y peregrinación a Sahagún, cuna del santo agustino, se imprimió en castellano las Horas Litúrgicas y de la Misa de San Juan de Sahagún; se editó una vida popular del santo predicador y se celebró un triduo solemne en su honor previo a la “fiesta mayor” el 12 de junio.
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